miércoles, junio 17, 2009

Mi truco fácil

Podría mentirme, se me da bien.
No pensarlo más, creer que nunca estás.
Que no tuvo lugar,... porque se me dio bien mentir(te).

Doy vueltas en la cama, recordándote.
Extraigo tu imagen de mi cabeza,
tu sonrisa borrosa, tus ojos perdidos tras de mí…
buscando la otra parte de ti bajo la almohada.

Observo el móvil conscientemente,
esperando que aparezcan tus labios en la pantalla.
Que tu número y tu nombre
se agreguen por arte de magia.
Trucos fáciles para días duros.

Me distraigo, hace calor, y se me hace fácil
pensar en el día que te vi por primera vez.
A partir de ahí, fotogramas
muestran los momentos únicos, singulares
y, poco o nada, especiales, quizás para ti.
Momentos sin más para mí.

(...)
Y ahora todos estarán pensando mal,
como gilipollas en el campeonato del mundo...
que lo que leen se creen, sin saber que
me guardo los detalles más oscuros.
(...)

Pero sí... y me da igual... otra vez lo creí,
una vez más (me/te) mentí…
ingenua, de mí.

Y ahora todos estarán pensando mal... (sobre todo, )