domingo, abril 12, 2009
Simplemente...
Nunca esperé que fueras para mí. No lo pensé. Quizás lo imaginé sin pensarlo, quizás. No lo creí. No me lo propuse. Simplemente estabas ahí. Para mí. O no. Pero estabas. Y fue difícil darse cuenta porque pocas veces, muy pocas, me vi reflejado en tu mirada. Nunca roce tu piel. Ni sentí tu pelo. Largo. Podría haberme perdido en él, en sueños, pero nunca lo soñé. Quizás podía haberlo imaginado pero no lo imaginé, ni lo soñé. No me lo propuse. Ahora quizás lo haga, quizás. No sé a qué sabes, ni a qué hueles. No he dibujado tu sonrisa. No la recuerdo. Apenas recuerdo nada, ni siquiera porqué estás sin estar, o si has estado alguna vez. Simplemente estabas ahí. Pero no en mí. No me lo propuse.
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2 comentarios:
Propóntelo cuando te des permiso para distraerte.
Prueba a hacerlo en julio.
aquí... sólo dejando una huella de mi paso por tu blog... me ha gustado mucho! saludos desde México
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