martes, febrero 09, 2010

Sin cero

Tal vez vaya a buscarte. Te sorprenderé como solía hacerlo, sin flores en la mano escondidas tras de mí. Sin notas a letra imprenta ocultas bajo el cenicero. Sin rimas fáciles que te hagan reír. Sin síntomas de mi presencia, sin haberte recogido la ropa del tendedero, sin haberte estirado las sábanas. Sin esperas en el 69 de tu plaza de aparcamiento. Sin cartas en el buzón, sin sellos, sin destinatario… Sin cena para dos con velas gachas ni incienso del Perú. Sin llamadas al porterillo de madrugada. Sin mensajes a tu celular: “Estoy en las escaleras. ¿Puedo deshacer tu cama?”. Sin arena de playa, ni conchas moradas. Sin sonrisas conquistadoras ni miradas profundas. Sin cogerte de la mano por detrás, sin susurros al oído, sin sustos. Sin excusas, sin disculpas. Sin hablar del pasado, sin sentido. Sin saber lo que digo, sin abrazos. Sin sentir lo que siento, sin llantos. Sin que lo entiendas, sin saber, sin importarme, sin preguntarte. Sin hablar… sólo sexo, sin amor.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

CONtigo es suficiente.

Con sentido, con espera, con ganas, ¿sin decir nada? El primer beso se da con los ojos...cerrados. Yo te arrastré a mi cama sin darme(te) cuenta.. por qué no te diste cuenta?

Tal vez vuelva tu presencia, sí, o no... No me preguntes, ya te lo he dicho.

Principessa.

Anónimo dijo...

Lo único que no sobra, es un abrazo tuyo, de esos que te envuelven, de esos que necesitaba, de esos que te hacen echar el aliento como signo de alivio.


Principessa.