Sé que no debí haber escrito aquellas palabras. Estaban envenenadas. La tinta no existía más que en mi dedo. El rimel del tus ojos explotó por momentos. Y cuando leíste los párrafos inmóviles el papel se quedó perplejo. No había rimas, sólo el descaro de alguien que cree saber del amor.
Y debí escribir sobre mar, arena y playa. Que el sol inunde las huellas de mis pisadas. Construir castillos de agua con tu boca y tu mirada. Bañarme desnudo en la arena de tus ojos. Perderme por la orilla de tu espalda y encontrarme siguiendo las huellas de mis pisadas.
Sé que no debí haber escrito aquellas palabras. Al escribirlas quemaban. Las letras se hacían ceniza y volaban. Y es que las letras son el papel que arde con el fuego de mi tecleo. Un tecleo humeante por escribir al pensarte y saber que la llama de lo leído se apagará como el fuego de tu alma consumido.
Y debí escribir sobre sol, cielo y luna. Pasar noches soleadas en el cielo de tu boca. Colgarme de las estrellas buscando la que más me quiera. Estirar la luna hasta marear las mareas. Pintar en el cielo mi sonrisa para que todos la vean. Tú eres mi universo y yo el astronauta que te explora en una nave y se siente el más grande aterrizando en cada uno de tus lunares.
Sé que no debí haber escrito aquellas palabras. Ahora las has leído. Sabes lo que pienso. Que ya no te quiero. Sé que no debí haber escrito aquellas palabras. Ahora ya no puedo borrarlas. Sabes lo que siento. Que ya no te quiero. Sé que no debí haber escrito aquellas palabras. Estaban envenenadas. Al escribirlas me quemaba. Sé que no debí haber escrito aquellas palabras. Ahora te has ido y sangro todo lo que escribo.
martes, marzo 18, 2008
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4 comentarios:
No debiste haber escrito aquellas palabras. No debiste entender que al leerlas las creería.
No debiste, pero lo hiciste, y ahora has descubierto tus miedos, y tu “querer huir”, tu “querer parecer”…
Como diría el gran Fito y fitipaldis "... porque escribo igual que sangro,
porque sangro todo lo que escribo."
Y quízás nunca debió escribir aquellas palabras pero fue la única forma de darse cuenta de lo que realmente sentía.
Un saludo.
Buen cambio a mi escrito
Pues yo sí creo que debió escribirlas, porque después de haberlo hecho sabe realmente lo que siente. Tuviese dudas antes o no... ahora seguro que no las tiene...
Con respecto a tu aportación a mi escrito... por un lado no creo que Fernando pudiese dar mejor respuesta y, por otro, con tu respuesta la carta que ella escribe incluso parece mejor de lo que es, pero sólo para tratar de estar a la altura de una gran respuesta.
Tu comentario, para mí, ha sido un regalo a mi relato. Gracias, muchas gracias.
Un besote!
...hacerlo puede que sea lo q más te dolió,y lo q más te liberó...
Yo lo sé.
Lo he hecho, y sus lágrimas me dolían como si fueran más...¡lo había hecho!
--> Había sido sincera, y liberada por ello.
Para mí eres un valiente.
Besitos de tu principessa de mentira.
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